VIAJE AL CUATRO DE OCTUBRE DEL 64 EN EL CENTRAL DE ARAGÓN

1 PARTE:  SALIDA DESDE VALENCIA ALAMEDA

Ha llegado el otoño y con él, un tiempo propicio para hacer inventario y seleccionar aquellas cosas que algún día deben de desaparecer de nuestra existencia. Inmerso en ello y en una caja de muy variado contenido, he encontrado un viejo billete de tren de cartón, de aquellos que al adquirirlo y en la propia taquilla se les marcaba la fecha del viaje con una máquina llamada Edmonton. Pertenecía al itinerario VALENCIA ALAMEDA-NAVAJAS, de 3a. clase, su fecha, 4 OCTUBRE 1964. El inesperado hallazgo me ha hecho recordar la importancia de aquel viaje, pues fue el último que hice en un servicio regular traccionado por una locomotora de vapor. Bueno, realmente el Tren Correo de Zaragoza de aquel primer domingo de octubre, iba tirado por dos locomotoras, una Mikado de Construcciones Devis Macosa, la número 141F-2310, más una Garratt de mercancías, esta última, rara vez vista con pasajeros en la línea de Teruel, con el número 282F-0428. Detrás de ellas, como casi siempre, una docena de vagones variados, siendo los últimos una pareja de coches de madera.

imagen:  Billetes de tren Valencia-Navajas 4-10-1964 || autor:  Colección Francisco Llabata

En mi familia, desde que éramos pequeños, este viaje lo hacíamos unas veces con el ómnibus llamado El Pájaro Azul, cuyo destino era Caudiel, y otras en cambio, utilizábamos el Correo de Zaragoza, pero el procedimiento siempre solía ser el mismo, desde Paterna y con el trenet màs taxi, acceder a la estación de Valencia Alameda, popular y cariñosamente conocida como la Estación Churra. Después, una vez comprados los billetes y asentados en el vagón correspondiente, nos dirigíamos a la cabeza de la composición. Allí, maquinistas y fogoneros se afanaban en afinar los últimos detalles antes de la partida. Presiones, niveles, engrases y limpieza, daban a las ya limpias máquinas una belleza más propia de un tren de leyenda.

imágenes:  Locomotoras que circulaban en 1964 || autor:  Colección Francisco Llavata

Hay que decir, que la estación tenía muy poco movimiento de trenes, por lo que aparte del murmullo y resoplidos del vapor, todo transcurría en una tranquila calma. En cambio, en la otra estación valenciana de Renfe, la de Norte en la calle Játiva, al normal ruído de los trenes, con la entrada y salida de un mundo de viajeros, había que añadirle los contínuos acelerones, frenadas y pitadas de unas precursoras carretillas eléctricas recargables, de la marca Fenwick, con las que se transportaba de todo, equipajes y mercancías diversas, así como el aprovisionamiento de agua potable a los coches de viajeros. Bien, con tantos recuerdos, casi no hemos apreciado que nuestro tren se ha puesto en marcha, y me dirijo a la izquierda del vagón para lanzar una rápida mirada al viejo Mestalla.

¡ Que bien se ven los trenes desde el campo!. Inmediatamente, paso al lado derecho, ya que llegamos a la Reserva y Talleres de Valencia Alameda, donde a estas horas ya están inmersos en febril actividad. Hoy, quizá debido a algún cruce con el Trenet del Grao, nos detenemos justo al lado de ellos, lo que me permite ver algunas impecables locomotoras, del 1 al 8, tipo 030 de Couillet, del 21 al 30, tipo 130 de Couillet también, e iniciadoras de este servicio en el Central de Aragón. La pequeña parada incluso me permite seguir anotando algunos números, la Mikado 2312, otra de las dieciocho que construyó Devis Macosa para este ferrocarril, Garratts de rueda alta de viajeros y de rueda pequeña para mercancÍas, de las dos series, las seis primeras las costruyó Galindo, que era como se las conocía en las estaciones y pueblos del viejo Central. Estaba también la 282F-0421, otra de las diez Garratts de la segunda serie, entregadas a Renfe entre 1960 y 1961, siendo las últimas locomotoras de vapor construidas en España.

imágenes:  TALLERES CENTRAL DE ARAGON AÑOS 60-70 || autor:  Colección Francisco Llabata

También estaban las dos Cucos, tipo 020, números 0261 y 0262, de Couillet, que colaboraban en trabajos del puerto de Valencia. Había también una locomotora tipo 240, serie 1500 de la antigua M.Z.A y que a veces ayudaba en las dobles, tanto a viajeros como mercancías y que se las conocía en Teruel como Las Madrileñas, la número 2409. Casualmente, nunca pude ver alguna de las elegantes cuatro Tubizes tipo 240, también de origen belga. Para terminar, había una pareja de tanques 242, números 0267 y 0269.

Estaban considerados estos talleres como de los mejores de España, incluso un amigo, tornero en los Talleres de Valencia Norte, me hablaba de ellos con admiración contenida. Fue el Central de Aragón una compañía belga no muy grande, pero que se dotó de los recursos necesarios para atender el difícil trayecto que servía.

Bueno, daría para mucho más hablar de los Talleres, pero el tren se ha puesto nuevamente en marcha tras el grandioso espectáculo, y lanzado de nuevo ya ha empezado a transmitirnos la clásica sensación de ir a lomos de un caballo. Si, cabalgamos. Todo esto lo íbamos dejando atrás y poco después de cruzar perpendicularmente la vía del Trenet al Grao, el convoy ya llevaba la velocidad de crucero.

A lo lejos se distinguía el castillo de Sagunto, siguiente punto importante de este viaje con destino a Navajas, que seguirá en la segunda parte de este artículo de viaje al pasado.

Francisco Llabata. Recordado en Paterna 2021.

imagen:  Mikado 141-2313-141 2302 am || autor:  Colección Francisco Llabata